Sistema cristalino hexagonal
Los sistemas cristalinos hexagonales conforma los sietes sistemas cristalinos de los cuales se habla en cristalografía y cristaloquímica.
Estos sistemas tienen la simetría de un prisma regular y cuentan con una base hexagonal, dentro de esta categoría tenemos el grafito. Estos sistemas cuentan con tres ejes iguales y uno desigual.
Los sólidos se construyen partiendo de la repetición en los espacios de las estructuras elementales paralelepípedos, las cuales llevan por nombre celda unitaria. Los ejes del paralelepípedo elemental o las longitudes de los lados de los ángulos que se forman hacen que sea posible que sean agrupados por los siete sistemas cristalinos. Cumpliendo con esta función, podemos decir que a=b≠c.
Los sistemas cristalinos se clasifican por la disposición simétrica y repetitiva en las cuales están las caras del cristal. Esta posición es el resultado del orden interno de los átomos que lo conforman, lo cual es característico de los minerales. Los sistemas cristalinos cumplen con un eje senario o sistema ternario.
Los sistemas cristalinos
Un cristal que crece en las condiciones óptimas, se va a desarrollar de forma favorable, lo cual quiere decir que obtendrá superficies externas uniformes y planas, las cuales asumirán formas geométricas que serán regulares.
Existen 32 clases de cristales, los cuales cuentan con características (elementos simétricos, ejes de rotación, planos simétricos) que permiten que se clasifiquen estos minerales en los seis sistemas cristalinos.
El sistema cristalino hexagonal se conforma por cuatro ejes de referencia, de los cuales tres de ellos poseen la misma longitud en el plano horizontal, cortándose bajo ángulos de 120 grados, dando como resultado un cuarto eje que será o más largo o más corto que los otros y tendrá una posición perpendicular al plano que los contiene.
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